El Gobierno destina 341 millones de euros a la nueva convocatoria del Programa «Reindus»
El Gobierno destina 341 millones de euros a la nueva convocatoria del Programa «Reindus»
El plazo de presentación de solicitudes a esta convocatoria finalizará el 20 de agosto de 2020.
El Consejo de Ministros ha aprobado el Programa de Reindustrialización y Fortalecimiento de la Competitividad Industrial 2020, también conocido como «Programa Reindus», cuya finalidad es favorecer la consolidación de la industria tras la salida de la crisis derivada del COVID-19. El importe global del préstamo a conceder por beneficiario no podrá superar los 800.000 euros, y el plazo de presentación de solicitudes a esta convocatoria finalizará el 20 de agosto de 2020.
El programa está especialmente dirigido a empresas afectadas por perjuicios económicos derivados del Covid-19, legalmente constituidas en España, que desarrollen una actividad industrial productiva, con independencia de su tamaño, y que no formen parte del sector público. El objetivo de la convocatoria es relanzar la producción y conseguir el reposicionamiento de las empresas industriales en el mercado, y evitar la excesiva dependencia del mercado exterior, que ha tenido un impacto negativo en la gestión de la pandemia.
Los principales cambios respecto a la convocatoria de 2019 vienen dados por las ayudas otorgadas por la Unión Europea, que permitirá mejorar las condiciones de financiación a través de tipos de interés más favorables y menores porcentajes de garantía exigidos. En concreto, el plazo de amortización será de seis años, con tres años de carencia y con tipos de interés variable según el tipo de empresa: un 0,1% para pymes el primer año (un 0,19% el segundo y tercer año y un 0,69% el resto de años), y un 0,19% para grandes empresas el primer año (0,69% segundo y tercer año y un 1,69% el resto de años).
Además de cubrir actuaciones como la mejora y modificación de las líneas de producción y la adquisición de equipos, el plan también financiará las inversiones orientadas a la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero, la prevención de la contaminación, la introducción de la economía circular o la implementación productiva de tecnologías de la ‘Industria Conectada 4.0’, como los sistemas inteligentes, sensores, realidad virtual e impresión 3D, robótica y vehículos no tripulados dentro del establecimiento industrial.